Breaking bad es posiblemente la serie más aplaudida de los últimos años. Conformada por un gran elenco, encabezado por Bryan Cranston, la serie destacó por su estilo visual e influyó en la manera en la que se realizan series televisivas hoy en día.
Todos recordamos a la maravillosa Anna Gunn, quien interpretó a Skyler, un complejo personaje que una década atrás, recibió una gran cantidad de odio por parte de los espectadores.
La actriz de 55 años, en su momento tuvo que cargar con el desdén de los fans de Walter White y actualmente hace una reflexión de cómo el tiempo le ha dado su lugar al personaje que ya muchos consideran, como una víctima más del manipulador Heisenberg.

En entrevista, Anna Gunn habló de como las personas se acercan a ella para emitir opiniones más reflexivas sobre Skyler y cómo el público ha cambiado su perspectiva.
Menciona que ha notado una increíble diferencia en comparación de cuando se emitía la Breaking Bad, aunque reflexiona que aún hay un largo camino por recorrer, pero que los cambios han sido sísmicos y son muy importantes.
La actriz sonríe al mencionar que la gente se acerca y le dicen que ella siempre fue un eje para los espectadores, otros le reconocen haber sido la consciencia de la serie y que fue un factor importante para que se acercaran al programa.
Finalmente, el comentario más poderoso que recibe es cuando le dicen que la primera vez que vieron el show, odiaron a su personaje, pero que la segunda vez que lo vieron, se dieron cuenta que al final fue una víctima más y se compadecen con un “Dios mío, esa pobre mujer”.

La narrativa de la serie estaba diseñada para hacer que los espectadores simpatizaran con Walter White, al grado que el personaje de Brian Cranston se haya convertido en todo un ícono cultural.
En su momento, la oposición de Skyler hacia Walter y sus acciones, pudieron ser vistas como obstáculos para el protagonista, lo que alimentó el odio por ella, logrando que los espectadores pudieran ser parte de la maquiavélica manipulación del protagonista.
Por supuesto, una serie de elementos en la narración de la historia, alimentaron a la complejidad y la ambigüedad moral de Skyler, convirtiéndola en un personaje más realista y fascinante, pero no por ello, una antagonista para odiar.

El cuidado al detalle en la historia de Breaking Bad estableció nuevos estándares para la televisión, comenzando una era dorada para las producciones de la pantalla chica, además de que permitió debates sobre la representación de la ética y la moralidad de los personajes protagonistas.
Tras el final de Breaking Bad en 2013, la serie tuvo una película secuela titulada El Camino, y una serie precuela protagonizada por Saul Goodman, el abogado de Walter White.
Y tú ¿aún consideras que Skyler merecía el odio que tuvo? Te leemos en los comentarios. Si te gustó este video suscríbete y síguenos en todas nuestras redes sociales, estamos como Pixelducksmx. Nos vemos a la próxima.